Político, diplomático y periodista. Educado en el colegio de El Sagrado Corazón de La Grita, donde es condiscípulo de Eleazar López Contreras, sirve bajo las órdenes del general Espíritu Santo Morales en la campaña librada contra la Revolución Restauradora de Cipriano Castro, destacándose en el combate del páramo del Zumbador (Edo. Táchira, 11.6.1899). Valiéndose de la recomendación de su tío, el general Calixto Escalante, quien ocupa el cargo de gobernador del Distrito Federal (diciembre 1901-marzo 1902), inicia su carrera política como secretario de dicha gobernación (1902-1903) y luego, como oficial en el Ministerio de Relaciones Interiores (1903-1904). Nombrado cónsul de Venezuela en Liverpool (1904-1906), de allí pasa al Consulado General de Venezuela en Berlín (1906-1908) donde lo sorprende la reacción contra Castro encabezada por Juan Vicente Gómez (19.12.1908). Mantenido en el servicio exterior como cónsul en Holanda y Francia (1909-1910), regresa a Venezuela para encargarse de la Secretaría General de Gobierno del estado Táchira (1910-1911). Director de la Imprenta Nacional (1911-1912), propone, en 1913, la fundación de un periódico que pronto se convierte en el vocero oficioso del régimen gomecista, El Nuevo Diario, cuya dirección asume de 1913 a 1915. Diputado por el estado Sucre para el Congreso de plenipotenciarios de 1914, participa en el Congreso de 1915 como senador suplente por el estado Táchira. A partir de 1915, a petición propia, reinicia su carrera diplomática en Europa. Delegado de Venezuela ante la Liga de las Naciones (1920-1933), se desempeña como ministro plenipotenciario en Londres (1922-1935). Su nombre es mencionado como el de un posible candidato para asumir la Presidencia de la República en 1931, a raíz de la renuncia de Juan Bautista Pérez, pero de hecho, no vuelve a Venezuela sino en 1935, después de una ausencia de más de 20 años, al ser nombrado ministro de Relaciones Interiores (diciembre 1935-febrero 1936) y luego secretario general de la Presidencia por el general Eleazar López Contreras. Participa en este último cargo, en la elaboración del llamado Programa de Febrero de 1936. Su larga estadía fuera del país le causa a Escalante dificultades de adaptación; solicita nuevamente un cargo diplomático y es nombrado ministro plenipotenciario y luego, embajador de Venezuela en Washington (1937-1945). En 1940, se le considera, una vez más, como posible candidato para la sucesión presidencial. Durante la Segunda Guerra Mundial, juega un papel destacado en las labores diplomáticas inherentes a las relaciones entre Venezuela y Estados Unidos, así como en la preparación de la Conferencia de San Francisco (1945) que crea la Organización de las Naciones Unidas (ONU). No asiste a esa conferencia debido a que acepta, en julio de 1945, ser el candidato oficial a la Presidencia de la República, previo un acuerdo logrado entre Acción Democrática, principal partido de oposición y el Partido Democrático Venezolano (PDV) del presidente Isaías Medina Angarita. Inicia su campaña electoral en agosto de 1945, pero a las pocas semanas empieza a manifestar señales inequívocas de enajenación mental. Obligado a renunciar a su candidatura, hecho que desatará la grave crisis política que desemboca en el golpe de Estado del 18 de octubre de 1945, vive, hasta su muerte, recluido en un hospital psiquiátrico de Miami, retirado de toda actividad.