Madrid 27.3.1927 —
Caracas 5.5.1995
Filósofo, ensayista y profesor universitario. Luego de realizar estudios primarios y secundarios en su ciudad natal, intentó ingresar en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Madrid, pero su solicitud fue rechazada por no poder presentar el comprobante de adhesión al «Glorioso Movimiento Nacional». En 1947 salió de España a Francia, trasladándose luego a Venezuela, donde estudió filosofía en la Universidad Central de Venezuela, graduándose en 1951. Ese año viajó a Europa para realizar cursos de especialización en las universidades de Cambridge (Inglaterra) y la Sorbona (Francia). A su regreso al país, en 1953 fue nombrado profesor asistente de la Universidad Central de Venezuela hasta 1955 cuando es clausurada la universidad por el gobierno del general Marcos Pérez Jiménez. Entre 1955 y 1958 trabajó en una compañía inglesa, primero como jefe de Publicidad Comercial y posteriormente como jefe de Promoción de Ventas. Al ser derrocado el régimen de Pérez Jiménez, en 1958, regresó a su labor docente en la Universidad Central de Venezuela. En 1962, en esa casa de estudios obtiene el doctorado, en filosofía, con una tesis sobre Platón, bajo la dirección de Juan David García Bacca. Durante su primer año sabático perfeccionó sus conocimientos de lógica con Bochenski en Suiza y al retornar a Venezuela obtuvo el ascenso a profesor titular. Nuño fue director del Instituto de Filosofía de la Universidad Central de Venezuela desde 1975 hasta su jubilación en 1979. En la universidad fue catedrático de Filosofía Griega, Lógica Matemática, Filosofía de la Ciencia y Filosofía Contemporánea (marxismo y existencialismo). Estableció los estudios sistemáticos de postgrado en filosofía en Venezuela en lógica y filosofía de la ciencia. Desde 1976 fue miembro del Instituto Internacional de Filosofía, de la Unesco, con sede en París. Se distinguió como profesor invitado de las Universidades de Barcelona y Madrid (España), Río Piedras (Puerto Rico), San Marcos de Lima (Perú), y la Universidad Autónoma de México, donde además fue fundador de la revista Crítica del Instituto de Investigaciones Filosóficas de esa Universidad. Sus intereses filosóficos fueron de distinta índole; sin embargo podemos centrarlos en filosofía griega, en general, y Platón en particular. La filosofía alemana ocupó parte de sus primeros estudios, de la cual surgió un libro sobre Heidegger. Sus años de formación filosófica le condujeron al estudio de la Lógica Matemática y la Filosofía de la Ciencia, de allí la gran influencia de Bertrand Russell y Wittgenstein, que encontramos en su pensamiento filosófico. Sus estudios en Francia, al lado de Merleau Ponty, le condujeron a compenetrarse con el movimiento existencialista sartreano, de los que produjo un libro sobre la literatura de Sartre y una serie de ensayos sobre existencialismo. Nuño fue un filósofo con un espíritu inquieto, de los que no se contentaban con el conformismo de ideas, hábitos o creencias ajenas y, si bien es cierto que no produjo, ni se propuso construir un sistema filosófico propio, no es menos cierto que su pensamiento es de los más notables en lengua hispana. En sus últimos 15 años Nuño se dedicó con gran fervor y entusiasmo a cultivar el ensayo corto en temas que abarcan la filosofía, la literatura, la política, los problemas internacionales, el cine, entre otros, llegando a escribir unos 1.000 artículos para revistas y periódicos tanto de Venezuela como de otros países de habla hispana.